Los cuentos populares son instrumentos socio-culturales que permiten a los niños y a los adultos reflexionar sobre el propio mundo interior y exterior, identificándose con los protagonistas de la historia y empatizando con ellos. Son fruto de la memoria colectiva de una comunidad en un momento histórico-cultural específico. A un nivel más simbólico, cuestionan elementos personales que tienen resonancia tanto en el niño como en el adulto, estimulando un mecanismo general del ser humano: la búsqueda del significado de las experiencias.
La historia de Hansel y Gretel: ¿a partir de qué edad? Diferentes estudios de los años ’70 y ’80 (Stein & Glenn, 1979; Marchesi & Paniagua 1983; Nelson 1989) han evidenciado que a los tres años la única característica relevante de una historia para un niño son las consecuencias de los acontecimientos.

Otros estudios más recientes (Iandolo, Esposito & Venuti 2012, 2013) han subrayado cómo, a los tres años, las competencias narrativas principalmente permiten al niño enfocarse sobre secuencias de acciones, como en un listado de la compra. De forma progresiva, entre los cuatro y seis años, la mayoría de los niños van tomando mayor conciencia del suceso central de un cuento (argumento o tema central) y de las consecuencias del mismo. A los ocho años los niños alcanzan un alto nivel de competencias narrativas (en comprensión y producción), en la medida en que alcanzan estabilidad en la integración de los diferentes elementos del cuento y en centrarse en torno a los problemas, soluciones y elementos mediadores (Iandolo, Esposito & Venuti 2013).
Un resumen esquemático de la historia de Hansel y Gretel
La historia de Hansel y Gretel de los hermanos Grimm es un cuento popular del siglo pasado, muy conocido en la cultura occidental, que ahonda sus raíces en la dureza de la vida en Europa durante la edad media cuando, a causa del hambre y escasez constante de comida, el infanticidio era una práctica difundida. La historia gira en torno al problema de la escasez de medios de la familia de Hansel y Gretel, que lleva a la madrastra y al padre a tomar la decisión de abandonar a los hijos en el bosque.
- El comienzo de la historia y el problema central: abandonar a Hansel y Gretel a causa de la pobreza. Había una vez una familia compuesta por Hansel, Gretel el padre y la madrastra. Una noche el padre de Hansel y Gretel comunicó a su mujer su preocupación por no saber cómo alimentar a los dos hijos. La mujer entonces le sugirió abandonarles en el bosque y, a pesar de las dudas y la pena del padre, logró convencerle.
- La preocupación de Hansel y Gretel y el plan de Hansel para no ser abandonados: Hansel y Gretel oyeron la conversación y, cuando se hizo de noche, Hansel salió de la casa por la puerta trasera, recogió unos guijarros que había delante de la casa y que brillaban como monedas de plata iluminados por la luna.
- El elemento mediador para solucionar el problema del abandono: los guijarros de Hansel a lo largo de la senda. Al día siguiente la madrastra despertó a los niños y se dirigieron al bosque con el padre, cada uno con su trozo de pan, y Hansel por el camino iba dejando los guijarros que había recogido la noche anterior.
- El problema central: el abandono de Hansel y Gretel en el bosque. Una vez en el bosque, cada uno se fue a recoger leña y encendieron una hoguera. Hansel y Gretel se acostaron, luego se despertaron, comieron su trozo de pan y volvieron a acostarse pero sus padres ya se habían ido.
- El elemento mediador que llevó a Hansel y Gretel a una solución temporal del abandono. Cuando despertaron era ya noche cerrada y, cuando la luna salió, Hansel cogió a su hermanita y se fueron siguiendo los guijarros que les iban señalando el camino. Llegaron a casa y la madrastra les reprochó haber estado durmiendo mucho tiempo en el bosque, mientras que el padre se alegró de verlos.
- El segundo comienzo de la historia y el problema central: abandonar a Hansel y Gretel a causa de la pobreza. Poco después, la penuria volvió a asolar la región y otra noche Hansel y Gretel oyeron que la madre decía al padre que no tenían otra solución contra el hambre que abandonar a los hijos en el bosque y, a pesar de las dudas y la pena del padre, la mujer logró por segunda vez convencerle.
- La preocupación de Hansel y Gretel y el fracaso del plan de Hansel para no ser abandonado. Cuando se hizo de noche, Hansel intentó salir de casa para recoger los guijarros, pero la madrastra había cerrado con llave la puerta y el niño no pudo salir.
- El elemento mediador para solucionar el problema del abandono: las migas de Hansel a lo largo de la senda. Por la mañana la madrastra despertó a los niños y se dirigieron al bosque, cada uno con su trozo de pan y, esta vez, Hansel por el camino iba echando las migas al suelo para después encontrar el camino de vuelta.
- El problema central: el abandono de Hansel y Gretel en el bosque. Una vez llegados a una zona aún más remota del bosque encendieron una gran hoguera y los padres se fueron a recoger leña. Al llegar el mediodía, Gretel compartió su trozo de pan con Hansel, y luego volvieron a dormirse.
- El elemento mediador que no permitió a Hansel y Gretel solucionar el problema del abandono. Cuando despertaron era noche cerrada y, cuando la luna salió, Hansel cogió a su hermanita y se fueron buscando las miguitas que había estado tirando. Esta vez no encontraron ningún trocito de pan porque los pájaros se lo habían comido. Hansel intentaba consolar a su hermana Gretel muy preocupada, de todas formas no encontraron el camino de vuelta a casa ni tampoco como salir del bosque.
- El elemento mediador para solucionar el problema del abandono y el problema del hambre. Después de tres días, cansados, hambrientos y desesperados, vieron un hermoso pájaro blanco que cantaba apoyado en una rama. Al terminar de cantar, el pájaro salió volando y los niños le siguieron hasta que llegaron a una casita en cuyo tejado se posó.
- El elemento mediador para solucionar el problema del hambre: la casa de bizcocho y azúcar. Al acercarse, vieron que la casita estaba hecha de pan, cubierta de bizcocho y con las ventanas de azúcar. Así que empezaron a comer, Gretel la ventana de azúcar y Hansel el tejado de bizcocho.
- El elemento mediador que empeora el problema del hambre: Hansel y Gretel paran de comer. Mientras comían, escucharon una voz que preguntaba quién se estaba comiendo su casa. Los niños respondieron que era el viento y siguieron comiendo. De repente se abrió la puerta de la casa y salió una mujer anciana apoyada en una muleta. Al verla, Hansel y Gretel se asustaron y se les cayó la comida de las manos.
- La solución del problema del hambre: una bruja le da de comer y les hace descansar en su casa. La anciana entonces les invitó a entrar en casa, les dio bien de comer y les preparó dos camitas donde Hansel y Gretel se acostaron. Aunque parecía muy amable, la anciana era una bruja malvada -que no veía bien pero poseía un olfato muy fino- que acechaba a los niños, los mataba y se los comía.
- El elemento mediador que empeora el problema del abandono: la bruja encarcela a Hansel y esclaviza a Gretel. Por la mañana la bruja se levantó antes de que los niños se despertasen, cogió a Hansel y lo encerró en una jaula. Después despertó a Gretel y la obligó a ayudarla a preparar comida para que su hermano engordase, para después comérselo. A Hansel se le daban los mejores guisos mientras que a Gretel la bruja le daba muy pocas cosas para comer.
- El elemento mediador para solucionar el problema de Hansel con la bruja: conseguir tiempo. Cada mañana, la bruja se acercaba a la jaula de Hansel y le pedía que sacara su dedo para ver si estaba suficientemente gordo. Hansel sacaba un hueso de la cena del día anterior y la bruja, que no veía bien, no se daba cuenta del engaño y se extrañaba de que no engordase.
- El elemento mediador que empeora el problema de Hansel: la bruja no quiere esperar más. De todas formas, después de cuatro semanas, la bruja no quiso esperar más y dijo a Gretel que al día siguiente mataría a su hermano para comérselo.
- El elemento mediador para solucionar el problema de la bruja. El día después por la mañana la bruja dijo a Gretel que antes habría que hacer pan. Una vez encendido el horno la bruja instó a Gretel para comprobar si estaba bien encendido. Gretel se había dado cuenta de que la bruja le pedía que comprobara el horno para empujarla y, una vez dentro, asarla y después comérsela. Así que no se metió en el horno y dijo a la bruja que no sabía cómo hacerlo, cómo entrar en el horno.
- La solución del problema de la bruja. La bruja respondió que era simple, el hueco era tan grande que hasta ella podría entrar y, arrastrándose, metió la cabeza en el horno. Entonces Gretel la empujó bien adentro, cerró la puerta y abrasó a la perversa bruja. Gretel fue corriendo a liberar a su hermano Hansel, se abrazaron y volvieron a entrar en casa de la bruja.
- El elemento mediador para solucionar el abandono: superar la pobreza. Allí encontraron en todos los rincones piedras preciosas de las que se llenaron los bolsillos para llevarlas a casa.
- El elemento mediador para solucionar el abandono: la ayuda del pato. Se marcharon de la casa buscando una manera de salir del bosque embrujado. Después de un par de horas caminando, llegaron a un gran río que no sabían cómo atravesar. Gretel vio a un pato blanco al que pidió ayuda. El pato aceptó ayudarles pero no podían subirse encima los a la vez. Entonces se los llevó uno a uno.
- La solución del abandono y de su causa: la pobreza. Tras llegar a la otra orilla y caminar durante un rato, por fin vieron a lo lejos su casa. Se precipitaron dentro de la casa y abrazaron a su padre. El padre desde que los había abandonado en el bosque no había dejado de pensar en ellos ni un momento; además, su mujer había muerto. Hansel y Gretel empezaron a sacar puñados y más puñados de joyas de los bolsillos. Entonces las penas se acabaron y los tres vivieron juntos y felices para siempre.
Referencias:
- Grimm, J. & Grimm, W. (1857). Hansel y Gretel. En Mis cuentos favoritos de los hermanos Grimm. Trad. Cast. Cálamo&Cran, S.L. (J. Licitra). Barcelona: Combel Editorial, 2009.
- Iandolo, G. (2012). El cuento de Hansel y Gretel analizado según el Sistema Integrado de la Familia de los Osos. El blog de Psise.
- Iandolo, G., & Venuti, P. (2011). El Test Proyectivo de la Familia de los Osos y el Sistema Integrado de análisis. Psise: Servicio de Psicología Clínica del Desarrollo, Madrid, España.
- Iandolo, G., Esposito, G., & Venuti, P. (2012). Cohesión, micro-organización, estructura narrativa y competencias verbales entre tres y once años: el desarrollo narrativo formal. Estudios de Psicología, 34(2), 141-160.
- Iandolo, G., Esposito, G., & Venuti P. (2012). The Bears Family Projective test: Evaluating stories of children with emotional difficulties. Perceptual and Motor Skills, 114,3, 883-902.
- Marchesi A., Paniagua G. (1983). El recuerdo de cuentos e historias en los niños. Infancia y aprendizaje, 22, 27-46.
- Nelson, K. (1989). Narratives from the crib. Cambridge, Massachusetts: Harvard University Press.
- Stein, N., & Glenn, C. (1979). An analysis of story comprehension in elementary school children. En R. O. Freedle (Ed.), Advances in discourse processing. Vol. 2. Norwood, Nueva Jersey: Ablex.
- Venuti, P., & Iandolo, G. (2003). El Método proyectivo de la “Familia de los Osos”: manual. ODFLab, Universidad de Trento, Italia.
- Venuti, P., & Cesari, E. (1998). Proposta di un nuovo metodo proiettivo: La Famiglia degli Orsi. En A. Lis (Ed), Tecniche proietive per l’indagine di personalità (pp. 219-257). Bolonia: Il Mulino
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