Los procesos de aprendizaje son todas aquellas competencias que se desarrollan en el ámbito académico a lo largo de la educación del niño. Teniendo en cuenta la gran relevancia de la etapa escolar en el contexto diario del niño, la escuela adquiere también un papel más allá de la adquisición de conocimientos, en el que entran también en juego experiencias, aspectos emocionales y motivacionales.
Es de vital importancia detectar cualquier alteración, dificultad o trastorno específico del aprendizaje del niño, con el fin de proporcionar estrategias que le ayuden a alcanzar un desarrollo óptimo en función de sus competencias.